Memorias de un mercenario - Prólogo: Creacionismo
En el principio, el caos reinaba sobre la nada. Desolado, silencioso e infinito como el averno, el espacio era habitado por tinieblas y materia oscura.
Solo fue cuestión de tiempo; la eterna quietud se vio interrumpida por la inestabilidad de las fuerzas del caos; rápida, vibrante y terrible, una explosión surgida de un inmenso abismo negro consumió todo a su paso, así como el fuego consume la hierba verde.
Irónicamente, lo que originalmente debía destruir todo el espacio en un ligero soplido, dio origen a dos nuevas vidas. Sus cuerpos hechos de polvo estelar, sus conciencias surgidas de la materia oscura, sus palabras que en segundos podían crear y arrebatar, y su gran poder, comparable a una super nova. Estos dos nuevos seres serían conocidos como “Dahesis” y “Noxemis”, los primeros dioses que darían lugar a la creación del nuevo mundo, y del universo.
–Extracto tomado del libro “Creacionismo” Volumen 1.